El 19 de junio se metió en la historia sagrada del Dragón. Una tarde lluviosa, un Día del Padre para quedarse jugando a la lotería con la familia, toda la cofradía de dragones alucinados desde 72 horas atrás, salió echando humo de sus casas para clavarle de una vez al torito de Mataderos la estocada final.
Y apenas 7 minutos se tardó para barrer de la cancha al rival. Porque cuando los dragones se enfurecen son imparables. Hablo de jugadores e hinchas. Los jugadores se embarraban, furiosos, y los hinchas estrujaban sus corazones en cada grito, en cada ruego: semejantes unión de voluntades es difícil de torcer. Tan seguro estaba Defensores de terminar de una vez esta historia ante un equipo inferior, que no dejó que le remataran ni una sola vez. Si esto no es un record para meter en el Libro Guiness, no sé cuál es. En una final, que uno de los equipos –Chicago- no genere una sola situación de riesgo, es difícil de creer. Pero pasó y esto nos llena de confianza para la nueva historia de la Promoción, el último tramo de la picadora generada por maliciosos tipos de trajes que suelen reunirse en la calle Viamonte.
Deberíamos plantarnos ya y proponer jugar al menos el jueves y a la noche, para contar con un día más de descanso, considerando que los mendocinos llevan como 20 días descansando porque su suerte quedó sellada hace rato. Por exigencia de Futbolistas Argentinos Agremiados, el 30 de junio es el último día de trabajo para los futbolistas. Entonces, cuál es la exigencia de definir todo entre el miércoles y el sábado. ¿La programación de TyC Sports? Y a mi qué carajo me importa. No dejemos que la picadora nos clave justo sus dientes en esta última etapa. Por qué no el viernes a la noche en Defe – El Bajo estallaría- y la revancha el miércoles 29 en Mendoza. ¿Eh, por qué no? Los jugadores deben haber quedado agotados tras su nueva proeza de anoche, más épica aún en el medio del barro. En el cúmulo de injusticias, jugar ahora miércoles y sábado sería el colmo.
(Acertó bastante la gitana en la nota anterior, no? Voy a consultarla de nuevo, je...)
Miren lo que hicieron los de Chicago. No tienen codigos. Que bien que hicimos por el bien del futbol al romperte el orto
ResponderEliminar"Lamentable. No hay otra palabra para describir lo sucedido anoche a metros de La Candela, donde concentró Chicago. Una vez terminado el partido y la derrota en la final ante Defensores, el plantel completo, cuerpo técnico y dirigentes se dirigió rápidamente al predio del CEFAR en La Candela, donde estaban concentrados. Metros antes de llegar a destino, fueron interceptados por un grupo de hinchas que responderían a la fracción de la Provincia, los cuales robaron toda la indumentaria que era trasladada, más algunas pertenencias personales de los que viajaban. Además, hubo insultos e intento de agresión a algunos jugadores. El presidente Gustavo Lacanna hará la denuncia correspondiente mañana en la comisaría de la zona y a organismos de seguridad nacional. Además, con lo sucedido corrió la versión que Mario Finarolli (quien arregló su continuidad hace 15 días) daría un paso al costado, cansado de estas situaciones. Lo mismo harían varios jugadores.